Pocas horas antes del inicio del paro, la dirección de la empresa con el señor Ricardo Bagen Escudero como máximo responsable, impuso unilateralmente unos servicios mínimos del 70 % del total de la plantilla, un hecho inédito hasta ahora, pues en anteriores convocatorias jamás puso interés en evitar la interrupción de servicios esenciales. En dicho porcentaje no se incluía al personal de vacaciones o de baja, ya que a ese personal la empresa sí le dejaba ejercer su derecho a la huelga; sin embargo, sí se incluía a algunos miembros de comité de huelga.
Desde el primer día hasta el último y como viene siendo habitual, WFS vulneró de forma reiterativa y descarada el derecho de huelga: solicitando a los trabajadores la realización de horas extraordinarias durante sus jornadas y en sus días libres; el incumplimiento de respetar los servicios mínimos al personal asignado para tales efectos, encomendando faenas totalmente ajenas a la esencialidad de servicios; así como también asignando a personal de mantenimiento a sustituir los trabajos habituales de los huelguistas. Por si todo esto fuera poco, también modificó los turnos de la plantilla durante las fechas correspondientes a la huelga y llegó a retirar días de vacaciones previamente pactadas.
A pesar de este 70%, bastante cuestionable para lo que a porcentaje de carga de servicios esenciales esta empresa rige, nos hemos encontrado con turnos y departamentos donde el porcentaje de servicios mínimos era del 100%, sin ninguna posibilidad de que los trabajadores pudieran efectuar su derecho de huelga. Cabe recordar, que eran paros completos de 24 horas y a cada momento se mantuvo impedidos a los miembros del comité de huelga de acceder a las instalaciones, tanto para controlar el cumplimiento de los servicios mínimos, como para dar traslado de información de la huelga al personal de turno.
Este hecho también ha dejado en evidencia la ausencia de representación legal de la empresa en algunos horarios, sobretodo los que comprenden los fines de semana, siendo WFS una empresa que ofrece y anuncia sus servicios las 24 horas, los 365 días del año. Más de una vez nos encontramos con turnos con ausencia total de trabajadores, exceptuando un trabajador de seguridad y otros turnos donde los trabajadores en el mejor de los casos cuentan con algún mando intermedio que no puede asumir la representación legal de la empresa, como es el caso en la firma de acta conforme se ha impedido el paso de acceso a los miembros del comité de huelga. O algún/a pseudo representante que firme en nombre de la mercantil.
El señor Ricardo Bagen desde un principio manifestó la ilegalidad de la huelga apropiándose de facultad que bajo ningún concepto le corresponde, acusó un acto de chantaje y amenazó con el posible cierre alegando dicha huelga como causa. No solo jamás ocurrió tal cese; más aún, durante los días de huelga fue inaugurado un segundo almacén con todos los cambios organizativos que ello supone.
A pesar de todas las irregularidades y de los constantes obstáculos que WFS dispone con la sección sindical de la CNT, seguimos trabajando constantemente para denunciar el acoso, para frenar los abusos y manifestar la desconformidad con las decisiones que afectan a los trabajadores. Pese a lo que afirma la empresa, desde aquí manifestamos rotundamente la completa legitimidad jurídica y moral de un derecho constitucional como es la huelga y defender algo tan elemental como el puesto de trabajo.