Durante las últimas semanas, tres de los trabajadores/as de la plantilla recibieron varias sanciones y amonestaciones laborales por escrito. Estos toques de atención empezaron a emerger una vez concluida la huelga convocada este verano y los cuatro afectados/as se corresponden con personal afiliado a la misma sección sindical, todos ellos miembros del comité de dicha huelga. Los escritos fueron entregados con el visto bueno del que ya es el cuarto abogado de la empresa contratado específicamente para la aniquilación de la CNT. No son casualidades.
El diccionario WordReference define la palabra amonestación como advertencia o llamada de atención sobre un error o falta, antes de tomar una decisión negativa contra alguien. Es decir, lleva la amenaza implícita. Conociendo la irracionalidad del director de dicha empresa, Ricardo Bagen, y su actitud de “El estado soy yo”, la actitud que ya fue muchas veces denunciada por la misma sección sindical y con motivos de sobra, esta amenaza directamente pasa a ser una represalia.
Cada una de las sanciones y amonestaciones repartidas es más que dudosa y a millas del principio de la buena fe bajo cual se rige toda la relación laboral. Se han detectado acusaciones injustificadas y rebuscadas de errores o fallos inconcretos y difusos que no tienen consistencia ni entidad real, incluso situaciones de control, vigilancia y monitorización malintencionada del trabajador. Más claro que agua ha quedado que el objetivo empresarial establecido a priori no es otro que desmoralizar, asustar e ir abriendo expendientes sancionadores y acumular faltas contra trabajadores/as muy concretos con el fin de encadenar sanciones hacia los despidos disciplinarios.
Recordar que este empresario se enfrenta actualmente a numerosas demandas por reclamación de cantidades, interpuestas también por el personal sancionado, debido a su decisión unilateral de ignorar el convenio colectivo y no abonar el salario por el trabajo realizado. Juzguen ustedes mismos. ¿Qué más se puede decir sobre las actuaciones arbitrarias de este tipo? Tal como denuncia el sindicato CNT, ni son aceptables, ni reflejan una relación laboral profesional y deseada, por lo tanto y ante la inconformidad con los hechos, las amonestaciones y sanciones fueron impugnadas en los juzgados de lo social.